De cualquier forma, hay que felicitar a la organización por el verdadero interés que muestran año tras año en celebrar dicho evento y por haber logrado medio escapar de esa monotonía antes mencionada que parecía tenerles atados de ideas.
Precisamente, esto era algo que en Críticos del Metal reclamábamos con cierta urgencia en nuestro post `Sobre el Festival Leyendas del Rock´, todo con la intención de animar a que el festival subiese algún peldaño más para ubicarse en un puesto más acorde a lo que el público Metalero nacional desea en el fondo, o al menos, eso es lo que creo.
Así que, aunque todavía faltan escalones por subir, por fin el Leyendas se puso en cierto modo las pilas y la recompensa no se hizo esperar. Las destacadas cifras de público asistente a esta octava edición corroboran lo que digo. Hasta se notó la emoción de quien se dignó a comentarlo por el micro de uno de los escenarios durante la segunda jornada de conciertos.
Sin duda, el mejor Leyendas hasta esa fecha y por diferencia. Eso de mezclar más estilos y ahondar un poco en ellos ofreciendo buenas bandas, parece que gusta al público en general y es cebo para reclamo de muchos Metaleros de cualquier “especie”.
Por ese motivo, también debemos felicitar a la organización por su labor, más aún cuando consideramos que la nueva iniciativa de poner a la venta 400 abonos a precios especiales para la siguiente edición con varios grupos ya contratados, es un acierto como la copa de un pino. No me digan que ver allí mismo a Arch Enemy, Wintersun (aunque luego cayesen del cartel) y W.A.S.P. para la edición del Leyendas 2014 no es cosa de mérito, eso además de otras bandas nacionales también confirmadas que no eran las de casi siempre. Ese es el espíritu que en Críticos del Metal buscábamos en su día cuando posteamos nuestra crítica hacía la filosofía cansina del festival.
Enhorabuena por ese pequeño cambio de chip. Seguro que, tanto la organización, como los Metaleros de media España, estamos más que satisfechos con ese cambio. Eso sí, ahora habría que evitar a toda costa volver a caer en el pasado y se debería trabajar muy bien el festival hacia el futuro para seguir subiendo escalones sin ningún miedo a tocar techo, ni a prescindir durante unos añitos de algunas de las bandas habituales antes mencionadas, más que nada para que puedan dejar hueco a otras y de paso se hagan desear un poco más por su público con el paso del tiempo.
Otro asunto a destacar son los precios. Creo que pagar 55 € en taquilla por la entrada fue bastante asequible para no arrasar los bolsillos de los asistentes. Los precios de las consumiciones también fueron algo respetuosos y se pudieron digerir más o menos bien. La suma de estos dos factores da como resultado una afluencia mayor y un consumo menos mesurado, lo que prácticamente asegura el éxito en todos los aspectos. Estoy seguro que, sin columpiarse, todo funciona mejor mientras se traigan buenas bandas y se mantengan buenos precios.
Entrada |
A continuación destaco lo que más me gustó del recinto en su conjunto:
Justo antes de entrar, en el paseo de entrada y salida (unos 500 m. aprox.) hasta llegar a las taquillas, se podía disfrutar de una tupida y agradecida sombra de árboles que daba gusto, donde la gente se sentaba o se paraba a descansar y a refrescarse durante los desplazamientos.
Pulsera de acceso |
El interior |
- 5ª: `Está completamente prohibido fumar en el área de la piscina´.
- 6ª: `No se permitirá el uso de gafas de bucear, pelotas, colchones, hinchables o similares´.
La primera, poniendo unos simples ceniceros, la veo fuera de lugar por estar al aire libre. La segunda me da risa, es como quitarle a un niño el balón para que no se escuchen los chutes o para que no te peguen un balonazo en la testuz. Pero, tras ver in situ las instalaciones, nos vemos obligados a rectificar en lo del precio y creemos que vale la pena resignarse a esas dos condiciones durante un rato, aunque hieran, porque era una pasada de piscina para poder disfrutar de un buen paréntesis festero aun sin balón.
Las colas en las taquillas fueron casi inexistentes (excepto en alguna hora muy puntual) y los habituales controles de acceso no se hicieron molestos.
Acceso |
Buen colchón de césped |
Lo habitual cuando te arrimas a un espacio de este tipo, es ver y comprobar que da asco la poca consideración que se tiene con la gente Metalera por la cantidad de mierda que se puede llegar a acumular en ellas desde el día anterior y que dejan irrespetuosamente sin limpiar, por lo que da pena y náuseas sentarse a comer sobre “pegamento” y roña festera. Pero en este Leyendas del Rock 2013 estuvo todo como una patena. Ya era hora de que alguien tuviese un poco de vergüenza y miramiento, ¡por fin comimos a gusto!.
Area de descanso |
Excepto la línea de sol que se ve en la foto que se colaba por las tardes, era una pista cubierta en sombra con una pequeña grada para sentarse que fue muy agradecida a ciertas horas, igual que la barra que había enfrente.
Escenario Mark Reale |
En este punto debemos exceptuar el corte en seco que sufrieron Kreator durante su actuación y que se solucionó en pocos minutos. Después de escuchar la explosión que se oyó pensé que la cosa iba a dar más problemas de los que finalmente se dieron.
Otro acierto que tuvo la organización fue el tema de la recogida de vasos x €uros. De este modo se lograron "matar tres pájaros de un tiro": funcionó mejor la limpieza, se ahorraron trabajo y a más de uno le dieron una alegría. Buena iniciativa.
Ciertamente es maravilloso poder hablar así sobre un festival, pero eso no quita que hubiese cosas que no nos gustaron, aparte de las bandas cansinas. En este caso fue, como no, LA YA HABITUAL Y PUÑETERA CERVEZA CRUZCAMPO, que da pena hasta olerla y amarga como cosa mala. Ya no te cuento si se calienta un pelín.
Por otra
parte, las tiendas Metal, en mi
opinión, aunque no estaban mal… floja variedad y muy poca distinción entre unas
y otras, excepto algunas muy concretas.
Tampoco me gustaron los precios del alquiler de los boxes con enchufe para poder cargar los móviles.
Respecto a
la zona exterior, me refiero a la zona de aparcamiento y el camping, de pena. Aunque
me repugne, no es que me sorprenda que hubiera polvo a borbotones, ya que es lo
más típico que se suele ver cuando acudes a un festival de estas
características, pero debo decir que esto descuadra a cualquiera tras ver tan
precioso interior y tan desastroso exterior. Tampoco me gustaron los precios del alquiler de los boxes con enchufe para poder cargar los móviles.
Yo casi que iría pensando en acondicionar esa zona para que los fieles al festival no tengan que soportar un “rebozado de chocolate” tras la deseada y necesaria ducha bajo la chicharrina veraniega, para no tener que tragar chorros de polvo a través de los conductos de aire del vehículo, o para poder comer a gusto con los colegas frente a las tiendas de campaña sin tener que ingerir una cucharada de tierra en cada bocado.
¿No se ha logrado marcar distancias con otros festivales nacionales con tan sensacional interior y atractivo cartel?, entonces… ¿por qué no se trata de marcar también diferencias con el exterior?. Sería un puntazo grandioso. Para ello, aunque el césped sería una opción ideal, tampoco es que haya que complicarse mucho la existencia, con otro tipo de tierra (más rojita) y regándola ligeramente de vez en cuando, al menos se evitaría el sufrimiento respiratorio de la gente y las odiosas “tormentas de arena” cada vez que alguien da un paso o se mueve un vehículo.
El exterior |
A fecha de hoy, y según la información que conocemos, debo dar por supuesto que habría que lograr un compromiso más a largo plazo con el Ayuntamiento de la localidad para que saliera más ventajoso para todos acondicionar el exterior. Yo no descartaría nada después de ver el gran éxito que tuvieron los dos festivales consecutivos citados aquí hasta la fecha de este post.
Tras despachar
nuestra particular visión sobre el complejo en general, ahora nos toca opinar
sobre lo que vivimos por dentro sobre el terreno de juego.
La primera
noche (jueves 8 de agosto) tan sólo deseábamos conocer el recinto y tomarnos
unas copas antes de irnos a cenar a la zona de parking/camping. Durante esas copas pudimos disfrutar del directo
de Dünedain,
un grupo que conocíamos y que no era muy de nuestro gusto, pero se lo curraron de
lo lindo y percibimos facetas musicales y una técnica guitarrera dignas de
mención.
Al resto de grupos los escuchamos a la perfección desde el camping durante toda la noche. Nos gustaron mucho Stingers, que versionaron a Scorpions sonando literalmente idénticos, vocal incluido.
La jornada
del viernes amanecía con el típico fresco matinal al estilo albaceteño. Aunque
estábamos en la provincia de Alicante, el clima a 58 km hacia el interior, y
la relativa corta distancia y diferencia de altitud entre Villena y Almansa, me
hacía recordar aquellos amaneceres que pasé de guardia en Chinchilla, sobre todo
los de la garita 3 “La Loca”, esa de la que ya comenté en su día en otro post
por estos lares.Escenarios Jesús De La Rosa y Azucena |
Al resto de grupos los escuchamos a la perfección desde el camping durante toda la noche. Nos gustaron mucho Stingers, que versionaron a Scorpions sonando literalmente idénticos, vocal incluido.
El horario de apertura fue muy cómodo para que el personal de la acampada pudiese asearse, comprar y comer tranquilamente, sin prisas. Ese punto lo veo muy adecuado para que la peña recargue las pilas y puedan disfrutar más y mejor de los directos. Estoy harto de perderme grandes bandas en festivales que comenzaron a horas intempestivas e insufribles. Lo único que consiguen de esa forma es aplastar por agotamiento a mucha gente, y claro, eso luego repercute en el estado de ánimo, y por lo tanto, también en las barras y en el énfasis festero del personal.
Puntualmente
comenzaban a sonar los grupos del viernes 9. Comenzamos moviéndonos entre
escenarios, primero echando un vistazo a Leo Jimenez, que tan sólo fue eso,
un simple vistazo, y luego aterrizando en el escenario Mark Reale para ver algunos temas de Guadaña, que por cierto, nos
sorprendieron muy gratamente antes de lanzarnos hacia el escenario Azucena
para ver a la pequeña gran Doro.
Exhibió un directo bastante clásico, pero muy animado con su inagotable energía y por los típicos temas de Warlock que hicieron las delicias del público. Se le notó muy en forma, como si los años no hubiesen pasado para ella. La sorpresa de su actuación fue la legendaria versión que se marcó de Judas Priest `Breaking the Law´, que hizo explotar de júbilo al personal. El detalle es que, al acabar, Doro no se retiró tan rápido como hicieron otras bandas, aún estuvo varios minutos agradeciendo nuestro énfasis hacia ella y se le notó que estuvo muy a gusto esa tarde, incluso me dio la impresión de que le dolía abandonar el escenario.
A
continuación observamos como aparecían Sabaton en el escenario Jesús De La
Rosa mientras nos dirigíamos al área de descanso. Desde allí escuchamos muy
bien todo su concierto, pero… aunque parecían muy buenos músicos, no me
gustaron nada, me refiero a su estilo propio (me ocurre lo mismo con Dream Theater o Danzig). Cosa de gustos.
Sobre las
22:00 h. volvíamos a colocarnos frente a los escenarios principales mientras saltaban
a escena Testament, una banda que no suele fallar y que casi siempre complace
a sus seguidores en vivo. En esta actuación noté muy buena calidad en todos los
aspectos, sobre todo me encantó su sonido y la potencia que desataron.Exhibió un directo bastante clásico, pero muy animado con su inagotable energía y por los típicos temas de Warlock que hicieron las delicias del público. Se le notó muy en forma, como si los años no hubiesen pasado para ella. La sorpresa de su actuación fue la legendaria versión que se marcó de Judas Priest `Breaking the Law´, que hizo explotar de júbilo al personal. El detalle es que, al acabar, Doro no se retiró tan rápido como hicieron otras bandas, aún estuvo varios minutos agradeciendo nuestro énfasis hacia ella y se le notó que estuvo muy a gusto esa tarde, incluso me dio la impresión de que le dolía abandonar el escenario.
Doro |
Poco antes de terminar Testament nos dirigimos al lado opuesto para conseguir una buena posición para ver por enésima vez a Kreator. Petrozza y cia volvieron a estar a la altura de las circunstancias y atronaron en el lugar, tanto, que algo reventó en seco para sorpresa de todos (como antes he comentado) y hubo un parón de unos 15-20 minutos mientras se solucionaba el problema. Al final pudieron acabar satisfactoriamente su actuación para el deleite de los presentes.
Kreator |
Sonaron apoteósicos, oscuros, satánicamente opacos y muy cañeros, como muchos esperábamos escucharlos, pero con el añadido del espectacular sonido que hacía atronar el recinto con una simple caricia a cualquiera de sus instrumentos. Cronos estuvo a la altura, sin duda, me sorprendió bastante ver como mantiene intacto su espíritu Metalero, la voz e incluso el pelo J. Un crack de la escena. La pena es que ninguna foto de las que saqué son dignas de ponerlas aquí, me salieron fatal, no se si por la emoción o si realmente Venom endiablaron el ambiente.
Tras esta jugosa guinda concluía para nosotros la jornada, no fuese que para ver un rato a los Saurom tuviésemos que tragarnos otra vez a los Barón del siglo XXI.
El sábado
sobre las 17:40 h. nos encarrilamos para ver a Picture, banda holandesa que
conocía desde los ´80 y que ya debimos ver en el Leyendas 2010 de San Javier
cuando cancelaron su actuación, un hueco que finalmente ocuparon los Angelus Apatrida. La verdad es que tenía
bastantes ganas de verlos, pero defraudaron a mis oídos, me esperaba otra cosa
de ellos en vivo; algo más puestos al día.
Después de la actuación de otro de
los grupos insignia del Leyendas (Lujuria),
el escenario Azucena volvía a tomar un color serio con la aparición en escena
de los austriacos Belphegor. La siniestra atmósfera que crearon durante
todo su espectáculo absorbió la atención de bastante público, bastante más del que
me esperaba. Sonaron muy agresivos y tremendamente aplastantes en ciertos momentos, como si de un bombardeo se tratase, pero sin perder la buena actitud sonora, aunque en ocasiones pareciera que te fuesen a estallar las neuronas. La voz fue desgarradora y cortaba como cuchillos afilados. Nos gustaron mucho, también más de lo que me esperaba.
Belphegor |
Tras ellos, volvía a tener frente a mí a los Accept, esta vez sin Udo Dirkschneider, al cual pudimos ver en la reunión de la banda original en el festival Metalway de Guernica en 2005 y con U.D.O. en el Festival Metamanía 2003 en la Plaza de Toros de Valencia.
Qué pedazo de concierto nos dejaron en esta ocasión, mejor que el de Guernica, con un setlist a la altura de las circunstancias y donde se incluían grandísimos temas míticos de la banda y otros tantos de sus últimos trabajos Blood of the Nations y Stalingrad, de los cuales extrajeron petróleo en crudo. Lo bordaron, sin rallar a la peña con extensos y cansinos bis a bis como ocurrió en la mencionada localidad vasca.
Mark Tornillo, por su parte, dejó su marca de la casa y complació a diestro y siniestro con su grandísima voz. Sin duda, un magnífico recambio en el micro para Accept tras la sombra y el complicado hueco que dejó Udo allá por 1986/87.
Accept |
Lo cierto es que nos hubiese gustado disfrutar de más bandas, como Noctem, Crisix, Centinela o José Rubio´s Nova Era (que tenía un cantante impresionante), o incluso de Obús, que si me apuran, son a los únicos que mantendría como verdadera insignia del festival por los directos tan vistosos y animados que siempre suelen ofrecer sin hincarse demasiado en la nostalgia. Pero…, como siempre, las circunstancias varían según sopla el viento y no se puede estar en todo.
Personalmente, puntúo con un notable alto a esta edición del Leyendas del Rock. Con el tiempo veremos si logramos valorarlo con un inédito sobresaliente, y eso, muy pocos festivales de dos o tres días logran merecerlo.